Acá de nuevo me costó conseguir alojamiento. Hay gente de todos lados, los que vamos subiendo y los que bajan de La Quiaca o de Bolivia. Yo tengo ganas de cruzar, vamos a ver como sigue esto, si dan los tiempos y la guita. 
Ayer a la noche, me llamó Charly, que es uno de los pibes que viajaron conmigo desde Buenos Aires, y me vio en Tilcara. A la noche fui a cenar Llama a la masa y después fuimos con Charly y el amigo de él a un lugar que estaba lleno de gente y nos quedamos tomando ahí. Había una chilena bastante simpática, chicas de Morón, de capital, cordobeses, rosarinas. De ahí nos fuimos una banda de quince personas más o menos a El Kincho. Ya era tarde, pero el lugar estaba a full, es ni más ni menos que un quincho, bastante amplio, con piso de tierra, donde se baila y se jode hasta bien tarde. Terminé acostándome a eso de las seis bastante machado.
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